La hierba de san pedro es una planta herbácea anual o bienal perteneciente a la familia de las primuláceas, dotada de un tallo velloso, ramificado, en el cual se insertan hojas alternas; sus flores se elevan en parejas, gracias a la presencia de largos pedúnculos. La característica más notable de esta hierba es el desagradable olor que desprende cuando se estruja cualquier parte de la planta. Existen dos variedades de esta planta, ambas con igual uso medicinal. Se cría por todo el pirineo, especialmente por extensos prados.
FLORACIÓN
La hierba florece a partir del mes de abril, e incluso antes en determinadas zonas geográficas. De la recolección interesan tanto el rizoma y la raíz como las flores y las hojas. Para recolectarla se aconseja esperar al momento de máxima floración. Es importante proveerse de unos guantes ya que el jugo de la planta es vesicante. Una vez recolectada, se deja a la sombra, en lugar bien ventilado, o en secadero, a una temperatura máxima de 35 grados Celsius. Posteriormente se guarda en frascos herméticos.
APLICACIONES
La hierba de san pedro contiene taninos en elevada concentración, hasta un 38%. Además encontramos un aceite esencial, un principio amargo y unos cuantos ácidos orgánicos como el ácido málico o el cítrico. Sin embargo, esta composición está por confirmar, ya que los datos de que se disponen no son muy fiables. Los taninos confieren a la planta una acción astringente, hemostática, diurética y antirreumática. De estas propiedades se beneficia sobre todo la medicina de la infancia, ya que no es irritante ni tiene sabor desagradable. Por su efecto balsámico tiene aplicaciones en tratamientos relacionados con las vías respiratorias. En dosis moderadas tiene cierto efecto analgésico. Por último, es importante señalar que la esencia de esta planta, igual que cualquier otra esencia, no se debe emplear en dosis elevadas, pues puede producir trastornos nerviosos o fenómenos alérgicos.
ADMINISTRACIÓN
Decocción. Para inflamación de boca y garganta. Se hierven 60 g. De hojas de hierba en 1 l. De agua; se filtra el líquido y se edulcora a gusto de cada uno. Con la mezcla se hacen gargarismos 3 ó 4 veces al día como té de hierba. Para gargarismos o para aplicar directamente sobre heridas. Para ello se vierte 1/4 l. De agua hirviendo sobre 2 cucharadas de hierba; se deja enfriar, se cuela y se bebe una taza 2 veces al día. En farmacia se pueden encontrar presentaciones simples de la hierba, tanto el aceite esencial como el extracto fluido. También existe alguna presentación compuesta.
RESUMEN
FAMILIA: Primuláceas.
HABITAT: Prados pirenaicos.
FLORACION: Abril.
PARTE EMPLEADA: Rizoma, raíz, flores y hojas.
CASTELLANO: Hierba de Pedro.
USOS
Balsámico fuerte, analgésico moderado y antirreumático leve.
Importante: La utilización de la información sobre plantas medicinales, sin los mínimos conocimientos en cuanto a dosis y descripciones puede acarrear problemas o efectos secundarios. Usted deberá hablar siempre con un médico, farmacéutico o personal cualificado, antes de tomar hierbas o plantas medicinales. Tome los textos e informacíon como simple orientación para su posterior contraste y verificación por profesionales de la medicina. Mundo Tema, no asume ninguna responsabilidad en relación con el material incluido en la web.